Historia del Mastín Napolitano
Un gigante de Terciopelo Los ancestros del Mastín napolitano se criaron para la guerra y los sangrientos espectáculos de combate de la antigua Roma. Se cree que perros como éste pudieron haber acompañado a Alejandro Magno en sus conquistas allá por el año 356 a. C.
Este moloso italiano se forjó poco a poco en la región del Vesubio. Vive en el sur de Italia desde al menos dos mil años antes de Cristo y es por excelencia el perro de las granjas de compania. En 1882 se le reconoce oficialmente, pero en la época de la Segunda Guerra Mundial esta raza está a punto de extinguirse. Afortunadamente, fue recuperada y salvada en 1946 por el escritor y cinólogo italiano Piero Scanziani, que la reconstituyó a partir de algunos sujetos que quedaban. Su selección, que empieza entonces sobre la base de un estándar de raza, le transforma un poco para ser el perro más pesado y más potente que conocemos hoy en día.
El Mastín napolitano fue admitido en el grupo de perros de trabajo del AKC el 1 de julio de 2004.
Principales características Físicas del Mastín Napolitano Talla ( altura a la cruz ): De 65 a 75 cm. para el macho y de 60 a 68 cm. para la hembra.
Peso: De 80 a 90 Kg. para el macho y de 60 a 70 Kg. para la hembra.
Cabeza: Es corta y masiva, es ancha pero no debe tener un tipo muy acusado.
Cuerpo: El pecho es ancho y musculoso. La piel esta suelta y tiene muchos pliegues. Se práctica tradicionalmente el corte de la cola a la altura de la segunda o tercera vértebra. Las orejas se dejan naturales, colgantes y pegadas a las mejillas, o cortadas en triángulo. Pero la caudectomía y otectomía (corte de cola y orejas) están prohibidas en varios países.
Color y Pelo: Los preferidos son el gris, el plomo y el negro, se admiten manchas blancas en el pecho y en la punta de los dedos, los colores caoba, marrón, avellana e isabela están permitidos. Todos los mantos pueden ser atigrados.
Carácter del Mastín Napolitano Pese a su impresionante aspecto, es un animal calmado y plácido, y un excelente protector de la familia. Es un perro extremadamente equilibrado, dulce y sin peligro para los niños. Solo se vuelve temible si es provocado. Es principalmente un perro de guardia, pero también de compania y de exposición. De todos los perros guardianes de tipo molosoide, es el que tiene el carácter mas calmado. Su educación debe ser firme, sobre todo con los machos que son normalmente menos flexibles. El dueño del Mastín Napolitano, debe dominarlo siempre con la vos o con la personalidad, nunca con la fuerza ya que, como sucede con la mayoría de los perros, el Mastín Napolitano obedece a su dueño por afecto, nunca por miedo.
Aptitudes:Perro de compañía, perro guardián (también de la casa).
Principales Cuidados necesarios para el Mastín Napolitano Lo ideal para alargar su esperanza de vida consiste en dejarle en el jardín durante las horas calientes del día y meterlo en casa durante la noche. Si debe hacer de guardia, hay que prever un refugio a tal efecto para que el perro no sufra frío en el invierno. Pese a sus dimensiones, no necesita mucho espacio porque no hace demasiado ejercicio. Eso sí algunos ejemplares babean mucho. Hay que vigilar su alimentación sobre todo durante su periodo de crecimiento, porque un error alimentario puede frenar completamente el desarrollo del cachorro. Los ojos del Mastín Napolitano, pueden estar sujetos al entropión o al ectropión.
Por lo general, el Mastino tolera mucho el dolor gracias a sus orígenes como raza de pelea.
Una de las características clave de esta raza es la piel floja, lo que se traduce en unas articulaciones menos rígidas que en otras razas. Es importante comprender que unas caderas perfectas en el Mastino no tienen la misma constitución clásica que otras razas más "normales". La mayoría de Mastines con una salud impecable no suele superar los estándares de la OFA en este momento, pero esto no significa que estos perros estén lisiados o vayan a estarlo. Infórmese sobre la certificación de la OFA y los requisitos y garantías del criador en cuanto a las caderas y los codos. Los Mastines también son propensos a la pano-ostiosis (dolores del crecimiento). Es una afección que se puede dar cuando el perro tiene de 4 a 18 meses de edad, y por lo general desaparece por sí sola. Algunas veces, el cachorro del Mastino se ve afectado por lo que se llama "ojo de cereza", enfermedad en la que el tejido del ojo sobresale más de lo normal y el ojo se enrojece e inflama. Esta afección se cura por completo con una cirugía menor.
Una perrera resistente con un lugar para dormir adecuado suele ser suficiente para garantizar que el perro esté cómodo durante el invierno. Sin embargo, puesto que el Mastín napolitano es una raza de nariz relativamente corta, se debe tener mucho cuidado de que el perro siempre se encuentre en un clima caliente y húmedo. Asegúrese de proporcionarle mucha sombra y agua fresca en un clima cálido. El Mastín napolitano adulto come mucho: aproximadamente de 8 a 10 tazas por día de alimento para perros de alta calidad. Si quiere que su perro participe en eventos de exposición, elija un cachorro de exposición con buen temperamento para que se deje manejar por desconocidos.
Los cachorros suelen ser caros debido a la dificultad de criar ejemplares perfectos. Muchos nacimientos requieren inseminación artificial y parto por cesárea.